Caída de la Planta nuclear de Perry [Molk]

Dia 7 (El fluffy del juicio final)
Eres el sargento Levi Anderson de la guardia nacional, fuiste convocado para esta misión junto con 6 hombres más, el comandante te lo dejo muy claro.

“No habrá mas apoyo, estamos mas haya de nuestras capacidades desde hace días y esta tormenta de mierda perfecta no ha terminado, ni con Cleveland siendo una ruina con un cráter de 8 millas, tan solo vayan a ver qué diablos ocurrió”

Rápidamente montasteis en un humvee y pusisteis rumbo a la lo que queda de la central nuclear de Perry, seria un trayecto largo desde Akrom, pero toda cosa que volara estaba ocupada lanzando bombas incendiarias al norte, para evitar que las manadas que se habían terminado de juntar en los restos de “la zona”, lograran llegar al sur y arrasar otra ciudad, pero ese no es tu problema ahora.

“Esto es lo que hay, como ya sabéis, hace dos días la central nuclear de Perry estallo, por lo que pudieron ver desde el cielo, era la tapa de uno de los reactores, los restos se desperdigaron por tierra en su mayoría, se considera contaminada toda el área desde Painesville hasta el reactor, así como todos los alrededores”

“El ejercito había mandado fuerzas mínimas allí al dar el aviso de la invasión peluda, pero se perdió el contacto y no se pudo mandar a nadie porque faltaban manos ya, se pidió a civiles que sobrevolaran el lugar y lo único que atinaron a informar fue que las rejas exteriores habían sido rebasadas, como es costumbre, los fluffys caminaban sobre sus muertos”

“Por suerte, los civiles del área se habían alejado del lugar, aunque no tengo información sobre Painesville, esperemos que, al ver saltar la tapa de esa olla, todos hayan preferido correr, así de mal esta la cosa, seremos los primeros militares en estar por allí en varios días”

Llevabas contigo trajes especiales, equipo de medición, radio de largo alcance, vituallas para varios días y un montón de potasio, que dios se apiade.

Llegaste al atardecer al área, en el camino viste como varios civiles salían de sus casas al verte y te hacían gestos, al parecer, cuando todo se fue al infierno, varias personas se dedicaron a recoger a toda la gente que pudieron de Perry, Lane y Madison con autobuses escolares, vehículos propios, etc, sabían que el ejército estaba con las manos atadas y no vendrían pronto.

En la zona solo quedaban los que, por edad o condición no podían moverse, por suerte aun queda gente con corazón en el mundo y junto a cada uno de ellos había un voluntario. Habían montado toda una línea entre los voluntarios para ayudarse y un par de médicos y enfermeros iban de un lado a otro, les prometisteis informar y dar las direcciones inmediatamente, al menos anímicamente eso les alivio.

De la central poco podían informar, salvo que la gente que se acercó, vio grietas enormes en el suelo y los campos aledaños, con un olor asqueroso proveniente de ellos, como a basura quemada, tomasteis lecturas en las áreas habitadas y les indicasteis que todo estaba bien.

Por fin llegasteis a las puertas de la central, aquello era peor que una película de terror. En la entrada, la verja aún estaba cerrada y tenía más de dos metros de cadáveres de esos bastardos, echasteis un vistazo y mirasteis si los equipos daban indicación de radiación, nada…

“Sargento, yo no tengo ni idea de radiactividad, pero ¿no deberíamos captar algo ya?”

Si, desde luego que si, en chernovil había radiación en el aire a varios kilómetros, joder, deberíais haber detectado algo ya incluso en los pueblos, pero nada, hicisteis señas con luz a la central, pero todo estaba a oscuras, solo había escombros.

Decidiste dividir tareas, cuatro se dedicarían a habilitar la entrada, les indicaste que usaran gasolina y una cerilla, ninguno estaba inflado así que no debieron de ponerse hasta arriba de basura como los otros, aun así, lo pensaste dos veces e indicaste que mejor usaran una granada desde lejos.

“Señor, mire esto un momento”

Te indicaron el suelo, los cadáveres ocultaban manchas de fuego, tanto en el suelo como en la puerta, mirando alrededor se podían ver restos de otros fuegos, con la oscuridad no los habíais podido ver

“Bueno, creo que no somos los primeros con esta idea”

El resto os dedicaríais a mirar los restos cercanos, con los trajes puestos, para medir la contaminación de los “objetos”, había fragmentos del techo y paredes por todas partes.

Tras ver la pira arder y tomar medidas, decidiste dar parte al centro de mando, estaban sorprendidos también, el científico que tenias a cargo no se lo creía pero era una buena noticia. Los restos, obviamente tenían una buena carga radiactiva, no para matarte a menos que lo quisieras usar de asiento durante una semana, pero ahí estaba, lo importante era el aire y que no había vapores saliendo de la central, algo que simplemente no era posible.

No habían mandado vehículos aéreos tras la explosión, por experiencias pasadas, cualquier pájaro que volara sobre el agujero recibiría una dosis mortal de radiación, aun con el encofrado automático podría llegar a afectar hasta a los sistemas. Así que la opción eras tú, pero si en el aire no había nada…

Tu orden era clara, entrar hasta donde pudieras y averiguar qué diablos había pasado, una vez los cadáveres quedaron bien rostizados, fue más fácil terminar de machacarlos con el humvee. Algo que se había descubierto de los Fluffy era que: 1-son muy inflamables y 2-una vez quemados, eran más frágiles aun, por lo que aplastar sus cuerpos era más fácil que andar cargando con ellos, además era higiénico de cara a enfermedades.

Ya era noche cerrada, sin luces tuvisteis que usar las linternas, pasada la entrada y tras la primera curva, se podían ver una hilera de edificios, en el camino había cuerpos y cuerpos de más peludos así como la primera y segunda barricada que el anterior grupo militar debió de montar, en una tenían hasta una ametralladora ligera.

Por las indicaciones, había que avanzar más aun, hasta el reactor, teníais a mano los equipos y estabais con los trajes. No detectasteis nada hasta llegar casi al lado del “agujero”, donde antes hubo un reactor que ahora era concreto machacado, fuisteis tentando el camino y tratasteis de entrar por la primera puerta que había, era roja y reforzada pero no cedía ni un palmo, al lado viste una especia de lámina metálica, probablemente necesitaras una tarjeta.

Miráis por los alrededores, a vuestra derecha había un aparcamiento donde estaba la tercera barricada.

“No lo entiendo… ¿Dónde están esos bastardos?

Era cierto, se suponía que una turba de peludos había entrado aquí, al mirar por las vallas encontrasteis una sección en la que habían excavado hoyos, cerca había bastantes peludos muertos, pero los hoyos no eran lo bastante profundos como para que entraran. El otro grupo de edificios parecían oficinas y las turbinas, las puertas del segundo estaban cerradas con alambre de espino pegado, eso no evito que trataran de entrar pero la puerta se adivinaba intacta tras una columna de cadáveres super puestos.

Continuasteis revisando el área, cerca de la chimenea, se habían apilado varios fluffys, era llamativo porque sus cadáveres casi parecían ir en línea recta, a lo que un soldado apunto, que quizás trataron de hacer una torre de fluffys para llegar arriba.

“¡Señor!, ¡aquí!”

Uno de los soldados había encontrado una ventana de la planta baja abierta, entrasteis y diste la orden de buscar a los civiles o a los militares, quien sea que pueda explicar este lio. Pero lo único que encuentras es a una manada en un comedor, cuando entras todos vienen a ti, algunos estaban dormidos.

“buen señod, ¿ed nuedtro tuwno para id a skettiland?, nummies aquí se tedminan”

Los hombres estaban por acribillar a los bastardos, pero les paraste, aquí había algo raro, así que recogiste del suelo al smarty del grupo y trataste de hablar con él, al menos no era de esos smarty asquerosos que te cagaban y exigían cosas.

“haber, ¿Qué es eso de vuestro turno?”
“zi, otdos hummis veded dejan ir a skettiland, pedod solo en uunm…unm…”

Empezó a mirar sus patas y a retraerlas, juraría que trataba de contar

“unm… manadad, zi, una manada pod vez”
“y… ¿Dónde esta esa gente de verde?”
“fuewa, ellod vienen como seño y nos abwen puedta owwies, luego, puedta woja”

Al mirar en el edificio, entiendes que la puerta de dolor son las de salida, al parecer todas tienen alambre por dentro, cualquiera diría que convirtieron las oficinas en un redil, al mirar en la parte de arriba había mas manadas, las ventanas estaban cerradas y rotas, para que no se abrieran, solo había rendijas altas abiertas.
“… ¿hay alguien…” Encontrasteis a seis civiles y a los militares en una oficina del segundo piso, tumbados en camillas de campaña, todos con trajes de protección. Respondieron a vuestros llamados, pero estaban muy debilitados, el único con las fuerzas para hablar un poco dijo: “deben terminar, en poco el próximo lote debe entrar…mi tarjeta…, aquí está todo… rápido…”.

Una medición indicaba que habían estado expuestos a dosis moderadas de radiación, lo único que había allí aparte, eran armas, algo de munición y un montón de latas abiertas, parecía que se quedaron sin comida.

Me había entregado un fajo de papeles antes de desvanecerse, parecían una especie de diario, lo revise durante unos minutos.

“… no puede ser…”

Rápidamente use nuestra radio, pedí una extracción urgente para los heridos e hice que me pusieran con el científico y el comandante a la vez, los inste a que se dieran prisa si no querían morir, parece que me tomaron lo bastante en serio como para no tardar más de tres minutos de reloj

“¿y bien?, ¿Qué…

Los pare antes de que siguieran.

“Prioridad total, necesitamos sellar el reactor inmediatamente, no está controlado, repito no está controlado, en cualquier momento puede empezar a expulsar gases a la atmosfera, venga a encofrar ya, traigan a todos los contratistas del plan “redil” o nadie sobrevivirá en kilómetros”

Dejaste a dos hombres con los heridos y diste la orden de salir, al hacerlo, una muchedumbre de peludos te seguía, les dijiste que no era su turno y dijiste a otros dos soldados que custodiaran la ventana, pero que trataran de no matarlos.

Usaste la tarjeta en un identificador al lado de la puerta roja y se abrió, los niveles de radiación ya eran preocupantes aquí, mortales por un largo tiempo de exposición, pero asumibles para lo que os tocaba, sería mejor dar un vistazo rápido y salir. Fuisteis directamente a la entrada del reactor afectado, había indicaciones así que no fue muy difícil, también había manchas de sangre por los pasillos, pero curiosamente ni un cuerpo.

“Oh… joder” fue lo único que lograste decir, cuando llegasteis a las ruinas del reactor, al parecer la compuerta de seguridad voló en trozos y se clavó en la infraestructura, pero había una especie de camino hecho entre los restos de hormigón y hierro. Al llegar a la antesala del reactor, solo quedaban dos columnas de hormigón destrozados a los lados, un montón de sangre, la “tapa” del reactor aplastando un muro lateral y el “pozo” del reactor, que de cerca si parecía emitir un tenue humo.

“… ¿Qué cojones es esto?”, en el edificio, las mediciones eran extrañamente bajas, pero en el foso, el mayor pico eran 0,015 grays, vamos 1,5 rads por segundo y eso eran los restos de hormigón y la “tapa”. Cerca viste escobas con tablones y barras de metal pegadas, con cinta adhesiva en los cepillos.

“No me lo puedo creer, estos tíos realmente lo hicieron”.

Dia 1 (sin luz y con fluffys, todos pierden la cabeza)
Eres Aleph Moore, administrador de la planta nuclear de Perry y estas bastante preocupado. Cleveland se ha vuelto un cagadero de fluffys por lo que cuentan las noticias, tu mismo has tenido verdaderos problemas para venir a trabajar hoy, con carreteras llenas de cadáveres de peluches o manadas yendo por en medio sin mirar.

A eso hay que añadir, que ahora les ha dado por tratar de entrar aquí, ¿Cómo?, ¿Por qué?, te importa un bledo, pero la entrada principal esta llena de esos cabrones desde esta mañana, algunos compañeros dicen haberlos visto dando vueltas fuera de la valla. No te has cortado un pelo y has pedido ayuda a la policía he incluso has instado a que aquel que tenga un arma a mano, la use, pagaras muy contento la munición.

Los de seguridad se pasan el turno de mañana tratando de alejar a esas cosas, realmente te empiezan a dar algo de lastima, pero por la seguridad de todos, hay que aplicar la fuerza. Antes de que empiece el turno de tarde, sales a ver el percal y uno de los guardas se acerca.

“Señor, hemos usado de todo, porras, sprais de pimienta, incluso los tasers, hay que decir que muchos han muerto con todo eso, pero es como matar moscas a cañonazos”

Te indican un par de lugares por los que están tratando de entrar, aparte de la entrada principal, también te dan la mala noticia de que la policía no vendrá, están ocupados por todos lados, en eso se acercan los chicos del siguiente turno.

Mientras tratáis de espantar a todos los fluffys de la entrada, te cuentan los de la tarde diversos casos, como el de un fluffy que se metió en la chimenea de un restaurante y todos tuvieron que salir, ya que el humo empezó a acumularse, el cabrito estaba atascado y muerto.

El resto te cuentan cosas similares, alcantarillas obstruidas, cazadores disparando por el pueblo, tres accidentes de tráfico, hasta uno vio a un fluffy correr calle abajo, llorando con un dildo metido en el culo con cinta adhesiva.

Decides reunir a los guardias del turno de mañana y proponerles horas extraordinarias, con un pago mas jugoso de lo normal, por suerte todos aceptan, también pides que vayan a la armería mas cercana y se hagan con lo que crean pertinente, ya verán en contabilidad como desgravar esto, la enmienda favorita del país siempre se respeta.

Te pasas toda la tarde con el teléfono en la oreja, llamando a todos los guardas con la misma propuesta, incluso mandas a que compren camillas de campaña, ya que las noticias hablan de manadas infinitas, esta mierda se podría extender mucho.

Entonces, llega la noche y los problemas con ello, de repente, desde tu oficina del segundo piso escuchas gritos, luego disparos, sacas un revolver que te trajeron, admites por dentro que nunca pensaste que tu hobby fuera a ser útil en el trabajo, pero en cuanto sales afuera y ves una turba incontable de peludos, golpeando la valla, no dudas.

Durante varios minutos, cuatro guardias, uno de los ingenieros y tú, disparáis a la masa que se amontona, la valla comienza a temblar, pero logra resistir. Tras una masacre y tres cajas de munición, solo por tu parte, ves como se alejan por fin, hay una pila de peludos casi tan alta como la valla, eso es malo

Corres a la entrada principal y confirmas tu sospecha, varios fluffys han logrado entrar usando los cadáveres de sus compañeros, los guardas están golpeando con las escopetas y porras, hasta que uno de los más jóvenes aparece con una botella de wisky y un trapo dentro, lanzándola a la entrada y prendiendo fuego a varios.

Los muñecos corren y chillan, incluso se prenden fuego entre ellos al tratar de abrazarse unos a otros, le estrechas la mano y lo felicitas “tu contrato de tres meses pasa a ser indefinido”. Ya son cerca de las once de la noche cuando la luz se va, saltas de tu silla y corres por el pasillo, la luz regresa una vez mas y vuelve a irse.

“mierda de cristo, ¿¡que cojones pasa ahora?!”

Llegas a la sala de control, todos están gritando y dando información, parece que han acotado el problema, el sistema de seguridad a apagado todo ante una falla de la toma de agua para las turbinas, te arrascas la cabeza y bajas con varios ingenieros a la zona de aguas. Allí empezáis a revisar las tuberías y las bombas, no es hasta que drenáis una que notáis algo raro, si bien la tubería esta vacía, da indicaciones de que aun tiene liquido a partir de una sección.

Os poneis los trajes y vais a abrir una escotilla que esta a tres metros de la obstrucción, al abrir veis un montón de pelo de colores, “hijos de puta”. Al parecer, debían de haber encontrado las tuberías de extracción de agua en algún momento, dado que solo están activas un par de veces al día, debieron de entrar creyendo que era seguro y les pillo una toma de agua, se estamparon y ahogaron contra la rejilla secundaria para de desechos.

Comenzáis a sacar cuerpos, es una maldita montaña de cadáveres, al numero 20 dejas de contar, una vez se puede entrar ya en el tubo, más al fondo, hay una turbina para que el agua fluya hacia adentro, las aspas son lo bastante grande como para que entraran y por los restos de sangre y cuerpos, lo que has sacado eran los que ya habían pasado.

Al apuntar con linternas detrás de las aspas solo veis agua, eso no es bueno, se supone que no debería haber nada, suspiras y tomas el walkie talkie.

Dia 2 (contención)
Llegáis a la entrada por tierra de la tubería, al igual que dentro, hay esclusas para entrar, optas por abrir la mas cercana a la parte enterrada. Miras tu reloj, ya son las cuatro de la mañana, lleváis mas de siete horas sin dar soporte eléctrico, peor aún, te informaron de que los teléfonos dejaron de funcionar, ni siquiera los fijos, que las antenas no tenga energía es una cosa, pero que la línea telefónica falle es algo que esta fuera de tus manos completamente.

Al abrir, no veis ni rastro de agua por lo que ya te imaginas que es lo que obstruye este lado, metéis un par de garfios con cámara y comenzáis a sacar cuerpos, acercándolos a la ventana y tirándolos por ahí, así estáis hasta que sale un golpe de agua que arrastra cuerpos por él tubo en dirección al lago, bajas e inspeccionas el lugar.
Aun estáis como dos horas sacando cuerpos y despejando todo, luego, desde dentro y fuera a la vez, inspeccionáis por donde se han podido colar los peluches hasta que encontráis una trampilla abierta, casi en el borde del lago. La cerradura esta rota, por lo que decides que la suelden, también colocáis bridas de plástico para hacer más difícil que puedan abrirlas, aun que no crees que hayan sido los fluffys, quizás simplemente se corroyó por dentro, a saber.

Te llaman por el walkie talkie, al parecer un grupo de militares han llegado, les dices que les den vía libre completamente y que quieres hablar con el oficial al mando. Después del dichoso paseíto, ves como los peludos han vuelto a aparecer por las vallas y hay un grupo delante de la entrada principal, si no estuvieras tan cansado, te harían gracia.

Los militares los acribillan sin miramientos y abren la puerta, en dos horas, el turno de mañana debería llegar y tu necesitas dormir algo. Al pasar ves que los militares están montando barricadas en la entrada, así como en el interior, te llevan hasta la parte de atrás de uno de los reactores, donde están montando una especie de campamento.

Hablas con el oficial, un hombre llamado Phil que es sargento, al parecer vinieron al perder contacto con la central. Le das las gracias, pero antes de poder decir más, escuchas un par de gritos y como una valla cae al suelo detrás de ti.

Rápidamente tanto los guardas cercanos, como los militares y tú, comenzáis a disparar, esos cabronazos habían cargado desde lejos y de alguna manera, logrado tirar la valla de un golpe, ahora corrían por todos lados. Movieron un humvee sobre la valla rota y siguieron disparando, desde los arboles cercanos, una turba empezó a correr al grito de “sketiies”, pronto te quedaste sin munición y empezaste a dar patadas.

Era imposible, pararlos y para postre, llegaban avisos de que desde la puerta delantera tampoco podían detenerlos, estaban rebasándoles ya de la primera trinchera, el sargento grito que todos se reunieran en el patio central, fuiste también, pero de repente te entro el pánico al ver que estaban entrando al reactor, algún hijo de puta había dejado la puerta roja abierta.

Fuiste detrás de ellos, habías cerrado la puerta y perdido el walkie talkie, ya que lo habías usado para romper el cráneo al último fluffy que trato de entrar detrás de ti por la puerta.
Saliste corriendo por los pasillos, algo de alivio sentiste al ver que las compuertas de las antesalas del reactor estaban cerradas, llegaste al otro extremo del edificio y comenzaste a cerrar, cuando un peludo trataba de entrar.

“Pofabod, ayuditas?, fluffy esta atas… ¡SCREEEEEE!”, tratabas de cerrar, pero el cabrón solo se movía hacia adelante, pusiste un pie en su cabeza y tiraste con fuerza, “NUUU, GWANDES DOLODCITOS SCREEE”, tirabas y empujabas con el pie, el puñetero bicho empezó a ceder, escuchaste el crak de sus costillas y como vomitaba sangre sobre tus zapatos.

Finalmente lograste cerrar, cercenándole el cuerpo, “GRANDED OWWIES…haaaaggg…abrazitos…juguito boo boo no bue…”, comenzaste a patearle la cabeza y a estamparlo contra la puerta, tu ira era inmensa. Un perro entiende que debe dejar de arrimar el hocico a una brasa cuando se quema, esta basura podía estar justo debajo de una bomba atómica y seguirían igual de estúpidas.
Te recompusiste un poco, aflojaste la corbata y volviste sobre tus pasos, cuando viste como un par de esos jabalíes de mierda estaban aterrorizados, gritando “monstwo”, te terminaste de quitar la corbata y te dejaste llevar, simplemente se junto el cansancio, el hambre y la sensación de el peligro de que esas mierdas estuvieran aquí dentro.

Cogiste al primero, no era muy grande, seguro una cría mayor, daba igual, lo usaste de maza para golpear a otro que tenias agarrado con la otra mano, no paraste de golpearlos hasta que dejaron de moverse, luego soltaste al enano y destrozaste de un pisotón su cráneo ya sangrante, para pasar a estrangular con la corbata al otro, “no…ayu…argg” aprestaste hasta que se rompió la tela, luego cogiste su cabeza y la partiste contra una tubería.

Te levantaste y viste una barreta, fue una señal divina, no sabes cuanto tiempo fue, pero al terminaste con el ultimo, los pasillos parecían la escena de una película slasher.

Caíste al suelo, agotado y jadeante, no te reconocías, toda tu ropa era de un “mono color rojo” con trocitos del arco iris, usaste una silla para levantarte y recorriste las instancias, luego decidiste usar los pasillos de mantenimiento que conectaban con el edificio de oficinas, para no correr el riesgo de que entraran de nuevo.

Lograste entrar por el subsuelo, pero escuchaste gritos de arriba, subiste corriendo con la barreta en mano y al llegar viste como habían entrado también aquí, corriste a cerrar la puerta y te quedaste fuera.

Allí las cosas no eran mucho mejor, los militares y varios guardas habían hecho un circulo en la barricada del patio y disparaban a todos lados, viste como un grupo de fluffys venían en tu dirección, cargando. Barriste con los dos primeros de un golpe, los restantes pararon en seco, temblorosos, le clavaste la barreta a un tercero y con el aun enganchado en su cerebro de mierda, bateaste el cráneo de un cuarto.

“¡BIG MONSTWO BOO BOO, WUN WUN!”, escuchaste gritar, de repente los peludos comenzaron a huir, saliendo por debajo del vehículo, o tratando de excavar por las otras vallas, no recuerdas mucho mas que dar un grito de rabia y caer al suelo.

Dia 3 (Gonzo)
Eres Aleph Moore y despiertas sobresaltado, estas en uno de los catres de campaña que ordenaste comprar, al levantarte, ves al medico de la instalación, “¿Qué ha pasado?”. Te cuenta que tuviste un colapso por cansancio extremo y estrés, también te dice que te ha puesto sueros para que te recuperaras, al parecer pidieron una ambulancia, pero no pudo llegar por un atasco, ya ni saben cuántos accidentes han causado los fluffys en el día de ayer.

“¿Ayer?”, al parecer has estado k.o. más de 24 horas, también te dice que muchos han renunciado y se han ido, solo quedan dos guardas, tres técnicos, el mismo y tú, aparte de los militares. Le miras sin entender y este te indica que mires por la ventana. Tras las vallas puedes ver rebaños enteros, caminan de un lado a otro, mas lejos, en los árboles, puedes ver más grupos.

“Llevan allí desde ayer por la mañana, cuando perdiste el conocimiento, lo único que han hecho es crecer y crecer en número…”.

Eres “Gonzo”, el smarty Friend que queda vivo, llevas muchas bolitas del ciedo tratando de llegar a Skettiland, pero los monstwo de veded y otros hummis no te han dejado. Cuando viste las cosas con humu, sabias que el anterior Smadty del grupo decía la verdad, tu ya habías visto antes que los skettis se guardaban en cositas así, de donde salía humu blanco.

Has ido hablado con más Fluffys de que ya han llegado a sketiiland, pero muchos te llaman “Tunto”, que sketiiland tiene una torre enorme de skettis, eso era cierto, pero tú sabes que esa torre de nummies fue ya comida hace muchas muchas bolitas del ciedo, nada dura tanto, así que la nueva pila de sketties ha de estar ahí dentro, de esa cosa humeante. Aun así, unos pocos se han ido unido a tu manada.

Unos fueron a entrar por delante, pero les tiraron wawas de lud y muchos tuvieron los peodes dolodcitos y luego, dowmiedon pada siempwe. Luego, otro smadty llevo a su grupo por una puerta sereta, o eso dijo un fluffy de su grupo, pero era una trampa, muchos malos wawas se llevaron a familia y ahora solo estaba el, lloro mucho y le deje unirse a nuestra manada.

El ultimo plan de tu Smarty, antes de sueñitos etednod por palos wumn, fue juntar a todos los fluffys que pudierais y cargar a la vez, no fue mal plan hasta que tu manada vio al viejo monstwo boo boo, pensabais que al salir de “texad” ya no lo verías más, aun que había cambiado, era mas pequeño, no usaba su cosa de “peores dolocitod vrom vrom” ni llevaba la cara de un fluffy arrancada, todos huisteis, pues al viejo monstwo boo boo es inmodtal.

Pensaste, pensaste y pensaste hasta que Lugar de pensad daba owwis, pero tenías una ideíta, fuisteis por cueva de popo, en ciudad, cueva de popo llegaban a todas partes, allí, tuntos fluffy comieron malos skettis de pared, “eso nu skettis, eso e cable”, no sabes que es cable, pero no son sketties.

Muchos fluffys se perdieron, también visteis a muchos otros fluffys, que estaba muy grandes, pero casi todos parecían tener sueñitos eternos, además de oler muy muy mal. Al final llegasteis a puerta secreta, igual que arriba, era roja. “Jijiji…¡hummis no pode pawa a fluffys!”.

Eres Aleph Moore y ya no sabes que hacer, la central está en funcionamiento, pero en el último ataque, muchos fluffys se liaron a morder todo lo que pareciera un espagueti por muy lejano que fuera. Así que ahora tienes trasformadores que echan chispas, mientras se rostizan mas de quince de esos hijos de puta, añadir que, sin explicación aparente, no hay contacto por teléfono ni internet y nadie en la central tiene un teléfono satelital.

“¿Y su radio esta caput?”, le pregunte al oficial Phil, este afirmo sin ánimos, básicamente estamos aislados, para añadir, hay un enjambre de esos mamones dentro de las oficinas y los militares están tan cansados y con tan poca munición, que han preferido dejarlos encerrados, colocando alambre de espino dentro, para que no se acerquen a las puertas.

La verdad es que les entiendo, también a los que se han ido, al menos tuvieron la bondad de ayudar a poner en marcha la central, si por un casual llegan refuerzos podríamos reconducir todo, arreglar los trasformadores y mandar energía de una puñetera vez. Por ahora dejamos las barras de seguridad bajadas en el reactor, con un 10% de potencia nos sobra para nosotros.

Dia 4 y noche del 5 (el botón rojo)
La noche anterior pudiste dormir un poco, habíais echado a los fluffys de una oficina del edificio donde los tenéis encarcelados, para entrar usabais una ventana demasiado alta para ellos, habéis roto la maquina dispensadora y traído las raciones de los soldados, así como la munición que quedaba. Salir de la instalación era imposible, más allá de la verja se podía ver un mar de pelusas y alrededor de la central tampoco es que estuviera mejor. “Al menos no tratan de entrar” comentaste al Philp.

Ayer pudiste usar una de las duchas de urgencia para limpiarte un poco, pero como no había recambio de ningún tipo, usaste un mono de los de ingeniería. estuvisteis sacando los cadáveres del reactor y despegando los de los trasformadores, ni la gente de la central ni los militares te hicieron preguntas, no hacia falta, pero te pasaste todo el día mirando desde el puesto de vigía del parquin a los fluffys, mientras fumabas, tratando de tranquilizarte.

“Son idiotas, idiotas que creen que aquí hay espaguetis ocultos y nada de lo que les digamos va a hacer que cambien de opinión…, Jesús, como les ira en Cleveland.

Volviste a la oficina, allí tenían una radio puesta, quizás habían logrado parar esto y en poco llegarían refuerzos, alguien en el ejercito tenia que ver que una central nuclear llevaba sin dar señales de vida demasiado tiempo.

Al entrar, las caras de tus dos compañeros restantes y de otros dos militares no eran halagüeñas, al parecer iba todo tan mal que ya habían convertido Clevelan en un área de pruebas para armamento experimental, habían traído a exterminadores para asesoramiento y todo. También supiste que ayer la cosa ya se había recrudecido, cuando por culpa de los peluches, una nave cayo derribada al tratar de despegar, eso enfureció a todos.

Estabas mirando por la ventana a las pelusas sin pensar, cuando algo te vino a la mente, un sudor frio te recorrido la espalda, pero te auto convenciste de que no pasaba nada, “cuando volvió la luz a la central, ¿alguien reviso los controles TODAS las puertas?”. Pasaba que, las puertas de seguridad tenían un sistema de tarjetas tanto para cerrar como para abrir, así fue como pudiste parar la entrada en el reactor antes, sin eso, las puertas se podían abrir manualmente sin problemas.

Los dos técnicos te miraron y luego entre ellos, para acto seguido salir corriendo solo para escuchar una alarma, tu solo te llevaste las manos a la cabeza, las puñeteras puertas tenían una salvaguarda de fábrica y es que, cada vez que tenían un apagado súbito, estas se reseteaban y permanecían abiertas. La idea era que, en caso de un fallo eléctrico la gente no quedara atrapada, nunca te convenció mucho el sistema y hoy estas demostrando el por qué.

Dia 5 (Fallout)
Eres “Gonzo” el Fluffy más Smadty del mundo, la puerta secreta se abrió cuando se lo pediste y la empujaste, dentro había malos sketties, pero no importa, tú sabes que los buenos estaban al final. Subisteis y subisteis y subisteis, mucho y llegasteis a una puerta más, tu no podías pasar por barras negwas, pero bebbehs si, bebbehs de muchas mummash ayudaron y jugaron con cosa roja de pared, “hummis sieped usan cosas wojas para puertecitas de jaula”.

En silencio, buscasteis los skettis, los hummis veded estaban fuera de cosita de humu gwande, así que buscasteis tranquilos, hasta que un fluffy dijo ver cositas de humu más pequeñitas, por una ventana gwande, tras gran pureta gdis con mucho ruidito.

Pensaste, no había mas botones rojos, pero recordaste que tuviste un nidito en algo que los hummis llamaban “obwa”, allí cerca había un pedestal con una barrita negwa, eso movía cosas, os subisteis unos pocos encima y la empujasteis, pero no se movía.

Les dijiste al resto que esperaran en sala gwande de puerta gids, tu irías a mirar atrás, era más fácil que no os pillaran si solo eras tu. Había cuartos feos y oscuritos, pero uno tenía muchos colores, parecían como esos arbolitos que ponían cuando tiempos fríos, entonces lo viste.

Como fluffy smadty que eres, viste un dibujo igual al del suelo de cuarto grande con cositas de humus y a los lados, otros botones de colores, “Seguwo que edto abre cosita de humu y da los sketties” asique empezaste a pulsar, “este botoncito…” (en la pantalla del equipo, frente a Gonzo aparecen indicaciones, [cierre de entrada a antesala, reactor uno]), “unm… ete otwo” ([subida de barras de seguridad]), “ooo…es muy bonito…ete también” ([apertura de foso, reactor uno, alerta de seguridad, ¿está seguro?]) “¿hum?, aun papadeaaa…o, ota ve”

Los Fluffys en la antesala empezaron a llorar, cuando la puerta de su espalda se cerró, trataban de abrirla y le pedían ayuda, al poco, escucharon ruidos mas fuertes aun de la sala con pequeñas cosas de humus. La puerta del reactor puerta se abrió y una oleada de calor de mas de ciento cincuenta grados golpea la antesala, los fluffys ardieron por dentro, sus globos oculares estallaron, sus cuerpos exudaron heces, sangre y orina por cada recoveco, no habia gritos, solo unos instantes de dolor extremo y luego, una plasta de pelo, carne y mierda por todos lados, cociéndose a fuego lento…

Al poco de tocar el ultimo botón, escuchas el mayor screee monstwo wojo del mundo, “oh nuuuuuuu”, rápidamente empiezas a tocar muchos botoncitos, esperando qwue alguno calle al screee monstwo wojo, (Almacenamiento de circuito de agua del reactor) “ooo, vamosh ¡tunta cosa!” ([aumento de exigencia energética, no es recomenda…) “¡DA SKETTIS!” ([aumento de exigencia energética]).

Eres Aleph Moore y definitivamente, vas a sacarte un carnet de abuser para el resto de tu vida, todos entramos rápidamente en el reactor, para toparnos con que en la puerta de la antesala del reactor uno, estaba cerrado, un técnico al tocar la puerta aparto rápidamente la mano, estaba ardiendo. Fuimos corriendo al centro de mando, allí, un puto fluffy nos miró con terror mientras se orinaba sobre una de las consolas, causando un corto circuito, lo agarre del cuello y lo lance por los aires.

Empezamos a mirar que cojones había hecho, “¡JODER!, ¡APAGARLO, APAGARLO YA!”, pero los controles de las barras no respondían, al haberse hecho cortocircuito en el panel de control, uno de los técnicos dijo: “¡el agua del circuito interno del reactor, no está, se están fundiendo las barras!”, le dijiste que sacara el agua de nuevo, pero te grito que no podía, quizás se fundieron los tubos, ahí dentro estaba a mas de 300 grados.

“¡Derivar la tubería de la turbina, sacar agua directamente del lago!”, otro técnico dijo, con pavor, que ya lo estaba tratando de hacer pero que algo estaba obstruyendo hasta las tuberías de respaldo, semanas mas tarde descubrimos que eran cadáveres de fluffys que seguramente habían llegado flotando, desde Cleveland.

Encendí la señal del megáfono, “¡atención a todo el mundo, corran a buscar refugio, corran a buscar refugio, esto no es un simulacro!” no me vino nada más a la mente, pero por suerte lo “único” que pasaría es que un montón de combustible atómico se fundiría, se activaría el encofrado y empezaría a irse al centro de la tierra, derritiendo todo a su paso.

Pero dios tiene una extraña forma de jugar a los dados con los fluffys, la cadena de eventos que vendría, seria imposible de prever en su mayoría:

-Cleveland estalla, con tal potencia que logra desviar en una dirección concreta la masa atómica calcinante mientras descendía.

-las alcantarillas de Perry no fueron construidas de manera legal, uno de los anteriores alcaldes del pueblo, un mierda sin escrúpulos de nombre Hammond McPhisten, tenía que crear un sistema de recogida de aguas fecales para la planta nuclear. Pero en vez de seguir las normas, simplemente contrato a uno de sus “compinches”, dándole varios millones de dólares que luego se repartieron, el muy inútil ni siquiera separo su sistema de aguas del del resto del pueblo.

-los fluffys que durante la manada habían terminado en las alcantarillas, al igual que sus coetáneos de Clevelan, estaban llenos de metano por tratar de subsistir con basura y mierda.

Las investigaciones apuntaron a que la bola de desechos tomo contacto con las paredes de ladrillos de las cloacas, para luego activar el metano del ambiente, esto provocó que una bola de fuego radiactiva, cuya única salida próxima era el trayecto por el que venía cayendo, hiciera estallar la tapa del reactor uno y destrozara el edificio. Por suerte, la masa siguió bajando y los derribos causados por la explosión, clausuraron las alcantarillas, a tal altura y con tantos restos, que toda radiación era frenada por las aguas residuales, los escombros y la propia tierra.

Pero nada de esto lo sabes ahora, ahora solo estas en el suelo, con un fuerte dolor de cabeza por el impacto de la explosión y sin lograr entender qué coño ha sido ese retumbar, ni esa humareda que ves por la ventana que tienes justo encima de ti.

Te levantas con dificultad y escuchas como uno de los contadores empieza a volverse loco, instaste a todos a levantarse y aponerse inmediatamente los equipos de protección, por suerte la megafonía aun funciona, das aviso a la gente del exterior de que hagan lo mismo.

Era extraño, estabas en un estado de paz mientras todos se estaban volviendo locos, quizás habías llegado al punto en que todo te daba igual, avanzaste por los restos de los pasillos hasta llegar a lo que fue la entrada al reactor uno, allí, había una oquedad por la que pudiste empezar a sacar escombros. Hicisteis una hilera hasta el exterior mientras despejabais el camino, el sargento Philp se acercó, “¿hay algo que podamos hacer, realmente?”, seguías sacando trozos de hormigón, mientras le contestaste. “no lo sé”, lo hiciste con tanta tranquilidad, que se pararon en la fila unos segundos.

Tras media hora, lograsteis llegar al reactor, aquello era un desastre, las mediciones eran mortales, pero para ese punto tu ya habías hecho las paces contigo mismo, habías hecho todo en tu mano, simplemente dios quiso que un montón de descerebrados reventaran ese lugar. Al fondo, donde estaba el foso, viste al puto fluffy que había iniciado esto, el te miro y trato de huir buscando un agujero por el que escapar.

Lo agarraste con facilidad del pellejo y lo elevaste hasta tu cara, “madas cagaditas huuu huuu… awiwos…familia…po que…solo quewiamos skettis, huu huu…”. acercaste tu cara a la suya y a través del visor le espetaste, “te equivocaste de lugar”, el te miro y durante unos segundos no reacciono, luego sus ojos se agrandaron y comenzó a llorar profusamente.

Te parecía extraño que estuviera tan campante, había estado mirando el pozo durante el rato que os tomo llegar al reactor sacando escombros, una rápida medición te dio que estaba hasta arriba de radiación, pero… no parecía afectarle… fue entonces que apareció una sonrisa tan maquiavélica en tu rostro que el fluffy comenzó a patalear.

“Nos vemos en el infierno, rata de mierda”, y lo lanzaste al foso, “señores, creo que tenemos una oportunidad de arreglar este apocalipsis y dios nos ha dado la herramienta que más satisfacción podría causarnos”. Meses mas tarde, un grupo de científicos del Álamo corroboraron tu teoría, al parecer el pelaje de los fluffys es capaz de almacenar grandes cantidades de radiación, sin que esta logre llegar a su piel siquiera, esto abre un nuevo marco de posibilidades tecnológicas, pero ahora solo tenías una cosa en mente.

Una vez despejado el camino y preparadas las herramientas, saliste afuera, los militares irían recogiéndolos como pastores, mientras el resto irían cerrando el paso, los meterías de veinte en veinte, para evitar una estampida al intentar huir. “¡Pueden entrar!, ¡skettiland está aquí, pasen!”, una muchedumbre de fluffys comenzó a pasar por los restos del reactor, una vez llegan a la sala del foso, usabais escobas con tablas y barras unidas con adhesivo, para ir empujando a la manada hacia el agujero.

Sus gritos de terror te daban todas las fuerzas que necesitabas y no solo a ti, todos parecían disfrutar de esta venganza inesperada. Así pasaron las horas, mas y mas fluffys eran arrojados al humante agujero, todos celebraron cuando los detectores notaron una bajada de la radiación que emitía el lugar, estabais en el buen camino.

“Los liquidadores de fluffys” comento uno de los técnicos con una risa febril, obviamente os estabais contaminando, pensaste en despellejar unos pocos de esos bastardos y ponértelos encima del traje, pero llevaría tiempo y era mas importante salvar a la gente de este desastre.

El agujero se tragaba más y más fluffys, a saber que profundidad tenia, pero te hubiera encantado ver como se estrellaban contra el suelo ardiente o sobre la superficie del combustible, si, ver como se destrozaban y ardían esos putos llorones… tenias claro que lo primero que harías si sobrevivías lo suficiente… oooh si…, tantas ideas, tantos garfios, tanta sangra de peludos que querías derramar.

Al final, llego un momento en que el agujero se empezó a llenar, más o menos por el medio día, de la oscuridad brotaban voces débiles pidiendo ayuda, dos horas más tarde ya se empezaban a ver una cama de peludos, moviéndose y agitándose, llorando y cagando uno sobre otros. “Sargento, si yo tengo ganas de tirar una granada ahí, seguro que sus chicos mas aun, por favor, contrólelos, vivos serán mas útiles… y suenan mejor”

Salisteis del lugar y cerrasteis la puerta roja, fuisteis a revisar el reactor dos, lo apagasteis cuando estallo el uno y se quedaría así, estabais destrozados, todos habíais estado haciendo turnos rotativos, pero no erais suficientes como para no estar agotados, ni para evitar una contaminación peligrosa. Tomasteis bastante potasio y agua, comisteis algo y os echasteis a dormir, nadie tenia fuerzas ni para hablar, escribiste todo lo acontecido en un par de folios que te quedaste en las manos, si moríais allí, al menos que se supiera que fue luchando.


Cuando termine de leer la caída de Cleveland, me puse a buscar la historia del reactor de Perry, con la sorpresa de que no había nada, o al menos, yo no encontré nada, provee con palabras (obviamente en inglés) y tampoco, solo halle este post ( https://fluffy-community.com/t/nuclear-meltdown-fluffybooru-id-by-ringoffire/15354 ) del que saque la idea para el final.

Como suelo hacer, si no encuentro algo, lo creo yo mismo, además de que para mi proyecto gordo, necesitaba que la planta estuviera en ciertas condiciones y que el problema de la radiación se hubiera solucionado.

La verdad que me he tenido que devanar los sesos para encontrar algo mínimamente plausible (y con muchos agujeros de guion) para lo del reactor, es muy muy muy complicado lograr que uno explote y aquí no podría tirar del envenenamiento por xenón ni la mala construcción soviética, asique ha sido muy difícil.

Creo que han sido ya cuatro días de curro, pero estoy contento con el resultado, además he sacado de la nada a un personaje que me será muy útil luego en mi “tochotexto”.

Un saludo y si alguien sabe de un texto de Perry, me encantaría leerlo.

PD: no pude resistirme a iniciar partes del texto al modo que hicieron con lo de Cleveland, siempre me parecía gracioso lo de (eres y )

There’s a tag or category for non-English stuff.

Yes, I just sent it and I realized, sorry, it’s already done

(google traductor)

All good

esos fluffys casi provocan una explosion, agradesco que en la historia de cleveland se dicto que los esponjosos todos debian salir ya sin sus bolitas especiales y exterminacion de fluffys callejeros

La cosa es que esa ley va por estados, algunos creo que no la implementaron o si lo hicieron, no fue con la misma fuerza, aparte, hay que ver que ocurrió fuera de EEUU, a fin de cuentas se remarca que los Fluffys eran algo que solo estaba presente ahí (o eso parece entenderse), mientras que en Canadá se ve que ni tiendas tenían.

Es probable que cada país, a razón de como las manadas abandonaban EEUU y los estados donde eran perseguidos, irían adoptándolos y nuevas compañías terminaran por crear sus propias versiones a partir de los Ferales que les llegaba (biotoys, creo que era de centro américa, si no recuerdo mal y se creo después de lo de Cleveland).

Añadir que los Ferales son ya mutaciones que no tienen nada que ver con lo que creo Hasbio en si, lo cual es “normal”, ya que a la tasa de reproducción que tienen, mas que su genoma es una amalgama (un puto chicle), es probable que sean bichos que muy fácilmente puedan tener mutaciones (y quizás alguna sea favorables, de ahí me presupongo lo de fluffys de agua o los Jellenheimers y demás).

Lo que para nosotros en tiempo es una generación, para ellos pueden ser fácilmente mas de cien, eso da un ancho campo para que aparezcan “cosas”, si bien la tasa de muerte es brutal, eso es como estar afilando un cuchillo, además se puede ver que son imposibles de extinguir ya.